Viernes al fin

No recuerdo otra semana peor que esta, por suerte ya termina y si la dejo, puede llegar a ser capaz de arruinarme el fin de semana, oremos.



Que el maestro Eric Johnson nos guié con su gentil barrido sobre las cuerdas en esta magistral composición suya llamada "Manhattan". Yo te fui a ver Eric, yo te banque a muerte cuando un idiota se puso a chiflar en el medio del solo de este tema, lo agarre fuerte del hombro y con mi peor cara le dije -Deja escuchar idiota-.
La gente prefiere a Petrucci, Petrucci es repetitivo hasta el hartazgo con su escala pentatonica re-contra gastada y su técnica copiada a Malmsteen.
Este tema me parece alegre, para algunos es melancólico, para mi no


Una historia que ahora recuerdo y no tiene nada que ver con esto, corría el 92´ y habían venido los Ramones, nunca fui un punk declarado, pero a los Ramones no me los iba a perder por nada del mundo. Todo era barullo en el estadio Obras (no me vengan con "estadio Pesi", si así, mal escrito "PESI"), faltaba para que empiecen los Ramones, no recuerdo bien si esa vez fueron teloneros Attaque 77, a lo mejor fue la siguiente, los Ramones vinieron muchas veces, de repente, un silencio sepulcral, habían muchos punks de ley y muchos punkitos, algunos tenían crestas picudas, otros solamente picos o rapados extraños, media cabeza, cabeza entera, mohicano, hemisferio derecho o izquierdo, pero al momento que se hizo el silencio, apareció un flaco subiendo la escalera hacia la grada superior izquierda con una cresta gigante, roja como la sangre, altísima, tan alta que su propio peso la tiraba hacia un costado, sube, se acomoda contra la baranda y mira altanero como si fuera el dueño del lugar, de repente, con esa genialidad envidiable que caracteriza a algunos hinchas de fútbol, no solo por la velocidad en la composición, sino también por su poder de convocatoria y capacidad de guia casi telepática, un grupito chico pero con el volumen necesario para llenar el estadio empieza a cantar "COLORADO BOTON... COLORADO BOTON... SOS UN PAJARO LOCO LA PUTA MADRE QUE TE PARIO", el estadio estallo primero en carcajadas y al momento estábamos todos cantándole al colorado y riéndonos, el colorado se dio vuelta y después se fue contra la pared, cuando termino el recital, mientras me dirigía a la salida escuchaba entre las voces de fondo "chau colorado, chau".