Destino incierto

Subía despacio la viejita, como si estuviera a dos mil metros de altura en la cima de una montaña escarpada. Cada tanto tomaba fuerzas y seguía subiendo, siempre con cuidado, aferrando los deditos nudosos primero y asentando los pies enfundados en pantuflas después. No tenia miedo a la altura ya, ni a mirar hacia abajo cada tanto, porque el vértigo había cambiado.
En frente estaban todos los vecinos chusmeando, la policía había cortado la calle y acordonado la zona. Tomaban declaraciones a los posibles testigos mientras los porteros se encargaban de difundir la noticia a los recién llegados.
Estaba en desavillé sentada en el balcón. Era la tardecita y ella miraba como volvían los chicos del colegio, sola, tan sola como había estado desde que falleció su marido años atrás. Esa sensación extraña de estar desprotegida en la altura, ese vértigo se apoderaba de ella.
- Los dos habían hecho el edificio, eran dueños de todo -, contaba el portero de enfrente a cualquiera que se acercara. -Nooo, muy buena gente. Siempre sonriendo, muy amables... los hijos no tanto. Según lo que me habló ella ¿no?, no la venían a ver nunca, no la invitaban a su casa... A los nietitos chiquitos, que tendrán 4 o 5 años, casi no los vio, y esas cosas duelen, mas cuando se es grande. A todos nos va a tocar llegar a esa edad si Dios quiere, por eso a los viejos hay que tratarlos bien. Yo a los hijos de la señora no los conozco, los habré visto un par de veces solamente.
Ya pasada la conmoción del golpe seco, los gritos, los llamados a la ambulancia; ya pasada la tarde, con el sol en declive; la angustia, el abandono, solo quedan los curiosos, los chusmas, las estadísticas.
-Claro, los hijos le vendieron todo. Ahora lo único que le quedaba era su departamentito alla en el último piso. Hoy me saludo... me saludo y no pude ver mas nada, ¿me entiende?. Me tape la cara y me dí vuelta
Algunos vecinos que la conocían de vista trataban de adivinar siluetas como la de ella bajo una manta puesta por los policías en el piso.
La anciana entregada a lo transmutado, al miedo de caer convertido en atracción irresistible a tirarse, aferrada con una sola mano desde la cima del frente del edificio, subida a la baranda de su balcón, se da vuelta y saluda efusivamente a un portero asombrado que la miraba confundido por la escena.
Nadie la vio alcanzar la cima de una montaña y reirse de las desgracias y la soledad, nadie la vio arrojarse de cabeza a una vereda, ambas opciones son válidas en un terreno literario. El desenlace final queda solo en el mundo de la imaginación.

5 comentarios:

Viejex dijo...

Impecable. Nadie sabe que cosas pasan por la cabeza del suicida, pero invariablemente todos opinan y reparten culpas. Sabe Dios si los hijos se preocuparon por la vieja o no, si la misma vieja se dejo ayudar, si fueron ellos los que causaron su ruina, si la vieja soportaba a los nietos...

Hoy mismo mi mujer me contó una historia de una mujer que le dijo al hijo que si se iba de vacaciones a Brasil la iba a encontrar muerta al regresar. El mismo día que se fue, la vieja se suicidó. El tipo a duras penas puede con su alma, hoy.

Lidia Fernandez Budelli dijo...

Ay, la vejez...
Interesante escritura para alguien joven: poder incursionar en el alma de otro sexo, otra edad, otras soledades.
Suicidas hay de todas las edades, pero la montaña es cada vez más fácil de subir (y bajar) a medida que avanza la vejez

Anónimo dijo...

es la soledad la que mata.. no la vejez. Como siempre Thotila.. emociona y entristece. Beso!

Thotila dijo...

Estimados, Viejex, Lidia, calidas las palabras que se leen, muy agradecido, pero no estoy seguro de haber tocado muchas de las cosas que se me acreditan aca.
Arquitecto, si un hijo mio se va de vacaciones a Brasil, no me suicido, lo mato... por lo menos lo desheredo por murguero, usador de ojotas, porotero y come-travas. Hablando en serio, hay cada loco suelto.

Hay mucha razon en sus palabras estimada Andrea, siempre y cuando la viejita del relato se haya muerto, eso es algo que yo no se. (mua ja ja)

Zeithgeist dijo...

puto, sabes q no es facil ponerme la piel de gallina no? PUTO!